Razones Medioambientales
Nuestro objetivo es convertir las zonas industriales, con un alto poder contaminante, en uno de los puntos limpios de nuestro paisaje urbano.
Uno de los conceptos que más ventajas medioambientales ofrece a la hora de valorar la energia solar es el de nulo impacto ambiental. Así, el beneficio de su inversión redunda en beneficio de todos.
Cada ciudadano europeo es responsable del impacto que tienen cinco toneladas de CO2 lanzadas a la atmósfera al año. Una instalación solar de 10 kw (200 m2) evita lanzar a la atmósfera el equivalente a la producción anual de 16 toneladas de CO2, uno de los gases del compuesto llamado “efecto invernadero”. Al convertirse en productor de electricidad solar estará automáticamente compensando el deterioro medioambiental que se deriva de su vida cotidiana y de la de los suyos. Con esta iniciativa, además, su decisión queda enmarcada dentro del reto tecnológico de futuro de los países industrializados.
El proceso de producción de electricidad o calor no genera el más mínimo residuo contaminante, nada de contaminación acústica y sólo un discutible impacto visual; los materiales de los componentes de las placas solares son completamente reciclables e inocuos.
Y por si estas razones no fueran suficientes, consideraremos el hecho de que produciendo electricidad a partir del sol estará colaborando a reducir el grado de dependencia de nuestro país respecto a las inestables zonas del planeta de donde provienen las principales materias primas energéticas: el petróleo, el gas o el uranio.
El sol, junto a otras energías renovables, se convierte en la energía del futuro. La energía solar es silenciosa, fiable y de bajo mantenimiento.